Más de 1.300 personas murieron por un potente sismo de magnitud 6,8 que sacudió Marruecos la noche del viernes, sembrando el pánico en la turística Marrakech, cercana al epicentro, según un nuevo balance oficial divulgado el sábado por la noche.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó que el movimiento telúrico fue de magnitud de 6,8 y se produjo a una profundidad de 18,5 kilómetros, con epicentro 71 kilómetros al suroeste de Marrakech.
El Centro Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas marroquí (CNRST), en tanto, indicó una magnitud de 7
El terremoto dejó al menos 1.305 muertos y 1.832 heridos, «de los cuales 1.220 en estado grave», indicó el ministerio del Interior marroquí en un comunicado.
Las autoridades declararon el sábado por la tarde tres días de luto nacional, después del terremoto más potente registrado en este país del norte de África, según la prensa marroquí.
Tumbas cavadas
El pueblo de Tafeghaghte, situado a unos 60 kilómetros al suroeste de Marrakech, quedó prácticamente destruido en su totalidad, según pudo comprobar un equipo de la AFP.
Pocos edificios siguen en pie en esta localidad que se encuentra a apenas 50 kilómetros del epicentro del sismo. El ejército continuaba allí buscando a supervivientes entre los escombros.
«Tres de mis nietos (de 12, 8 y 4 años) y su madre murieron. Están todos debajo de las ruinas», dijo Omar Benhanna, de 72 años, un habitante de Tafeghaghte.
En el pueblo de Moulay Brahim, en Al Hauz, los equipos de rescate también trabajaban este sábado en busca de supervivientes entre los escombros.
Cerca de allí, los vecinos cavaban ya fosas en una colina para enterrar a las víctimas, según un equipo de la AFP presente en el lugar.
Por su parte, el ejército marroquí desplegó «importantes medios humanos y logísticos, aéreos y terrestres», como equipos de búsqueda, de rescate y un hospital de campaña en Al Hauz, informó la agencia de noticias estatal MAP.
En Marrakech, los marroquíes inspeccionaban visiblemente aturdidos los daños en sus casas entre montones de escombros, polvo y coches aplastados por las piedras.
«Entramos en pánico»
Videos grabados en Marrakech muestran a los habitantes saliendo despavoridos de los edificios en medio de la sacudida, escombros que se desprenden de los inmuebles hacia estrechos callejones y vehículos cubiertos de piedras.
En uno de ellos se observa un minarete de una mezquita que colapsó en la famosa plaza Yamaa el Fna, el corazón de Marrakech, y que causó heridas a dos personas.
Un corresponsal de la AFP vio a cientos de personas concentradas en esta emblemática plaza para pasar allí la noche por el miedo a las réplicas. Algunos lo hicieron con mantas y otros durmieron directamente en el suelo.